La hermandad del Rescatado, con motivo del rezo de la corona dolorosa que ponía el broche a los actos del 75 aniversario de la llegada a cofradía de la imagen de María Santísima de la Amargura, ha hecho pública su gratitud hacia las corporaciones, personalidades y entidades que hicieron posible que el acto del solemne rezo contara con la solemnidad y recogimiento que merecía.
La hermandad de los Trinitarios ha mostrado su gratitud a las cofradías -en las figuras de sus máximos responsables- del Cristo de Gracia, Prendimiento, Entrada Triunfal, Remedio de Ánimas, Calvario, Villaviciosa, Buen Suceso, Esperanza, Angustias, Jesús Nazareno y San Rafael. Gratitud extensible a la familia salesiana, a los padres Dominicos, así como a los párrocos de los templos a los que visitó la Virgen de la Amargura. Asimismo, el Rescatado no ha querido pasar por alto al quinteto de metales de la banda de la Esperanza, que acompañó a María Santísima.
La gratitud de la cofradía del Domingo de Ramos se ha hecho, además, extensiva a “los costaleros de ambas cuadrillas, con los capataces Carlos Quesada Márquez y Javier Santiago Hurtado, que dieron realmente significado al sentido de la palabra hermandad”. Asimismo, la corporación ha tenido muy presente a la cuadrilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno Rescatado, “por la donación de un broche conmemorativo de dicha efemérides, ejecutado por el artista cordobés Antonio Cuadrado. Por último, y no menos importante, la junta de gobierno quiere agradecer el compromiso de los hermanos que compartieron junto al resto, el solemne ejercicio pío del rezo de la corona dolorosa”.
