
Es la pregunta del millón y la respuesta a la misma no resulta sencilla, ya que tiene numerosas aristas éticas, morales y legales. Es por ello que la encuesta que esta semana propone La Voz de Córdoba camina en esa dirección.
Para ser exactos la pregunta es: “Después de la experiencia en Lucena, donde menos de la mitad de los convocados se han sometido al cribado voluntario ¿Debería la administración obligar a realizar a los tests?” Y las respuestas posibles son tres, yendo desde el sí, si la situación empeora, al no, pasando por la concienciación.
Y es que el cribado lucentino ha dejado de manifiesto que un amplio sector de la población no desea, por los motivos que fueren, someterse a un test de coronavirus. De hecho, el 52% por ciento de los 1.918 convocados no se presentó y, aunque los resultados fueran esperanzadores, solo 3 positivos de 921 tests, no deja de ser cierto que no se puede especular sobre los resultados que hubieran arrojado las 997 personas restantes.
Las pruebas eran voluntarias y hay dudas legales de que pudieran realizarse de manera obligatoria, conforme a derecho. Por lo que la cuestión no es baladí y puede que cobre protagonismo si la incidencia del coronavirus sigue creciendo. Ustedes tienen la respuesta.
