La Federación Vecinal Al-Zahara ha criticado este lunes que el gobierno de PSOE e IU en el Ayuntamiento de Córdoba “no está primando la seguridad y la accesibilidad en la Semana Santa 2017”, con motivo del traslado de la carrera oficial al entorno de la Mezquita-Catedral, “habiéndose plegado a una política de hechos consumados”. Según ha recordado Al-Zahara, el Consistorio “se había comprometido a informar suficientemente a esta federación vecinal y a contar con sus propuestas al respecto, pero a menos de 35 días del comienzo de los recorridos procesionales, es materialmente imposible realizar un proceso participativo adecuado”.
De hecho, la federación vecinal ha dicho lamentar que, “al margen de ver un plano de la ubicación de palcos y sillas, la única información con que contamos es a través de los medios de comunicación, a pesar de haber reiterado la aportación de la misma desde hace dos meses”. Al-Zahara considera que “el traslado de la carrera oficial se está haciendo de manera precipitada e improvisada” y que el Ayuntamiento “no está teniendo en cuenta las necesidades y preocupaciones del vecindario afectado, ni el de todos los ciudadanos que quieran asistir a los recorridos procesionales”.
Los vecinos han señalado que no cuestionan “la legítima solicitud de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de trasladar la carrera oficial al entorno de la Mezquita-Catedral”, pero “el Ayuntamiento tenía que haber antepuesto la seguridad de los asistentes, la accesibilidad de los residentes y a los comercios de la zona, y la repercusión para los habitantes de la zona del Campo de la Verdad, que ya se ven afectados por la Feria”, antes que sólo mirar “la mera rentabilidad económica y turística”.
Esto va a significar, según ha subrayado Al-Zahara, que “los vecinos afectados tendrán que sufrir fuertes restricciones en su vida cotidiana durante diez días, sin poder ni siquiera opinar sobre las mismas, ni siquiera a través del Consejo de Distrito Centro”. Por ello, Al-Zahara considera que “el traslado de la carrera oficial se está haciendo de manera precipitada e improvisada” y que el Ayuntamiento “no está teniendo en cuenta las necesidades y preocupaciones del vecindario afectado, ni el de todos los ciudadanos que quieran asistir a los recorridos procesionales”.